28 julio 2019

Género, subgénero, postgénero, pregéreno


En junio de 1989, apareció en el número 7 de la revista Clij un artículo de Manuel Vázquez Montalbán, en el que hacía referencia al género negro y la novela policíaca, el cual fue acompañado por dos ilustraciones de Torpedo 1936 de Jordi Bernet. El texto lleva por título "Género, subgénero, postgénero, pregéreno". Os dejo con el primer párrafo del artículo de Montalbán, y las ilustraciones correspondientes, la primera fue editada previamente en 1984, en el relato "La Galleta", en la revista Thriller nº 6, de Toutain Editor.  Y la segunda, "La siesta más larga del mundo", en el nº 4 de Thriller. Ambos relatos están firmados por Enrique S. Abulí.


Qué hay géneros y subgéneros es un tópico. Que no hay géneros mayores y géneros menores, también. Hay que desconfiar tanto de un tópico como del otro y recurrir a la máxima prueba de comprobación literaria: la lectura. Evidentemente la llamada novela policíaca es "una clase de novela", con algunos requisitos formales que en definitiva se resumen en uno: investigar un delito. Ni siquiera en la llamada novela policíaca es preciso el policía que la adjetiva. Sin embargo en la mayor parte de novelas policíacas se escriben en función de de una forma que las adscribe una corriente retórica  determinada y determinante dentro del género. Las más seguidas son las que apuestan ante todo por el desciframiento de un enigma (la novela enigma) y las que se dedican sobre todo a dar el marco social o psicosocial del delito (la novela negra). Si el ingrediente fundamental de la primera gran familia es un juego de adivinación, objetivo sine qua non de la novela, la materia prima de la segunda suele ser la investigación de los códigos morales de las víctimas y sus verdugos, sobre el fondo de la moral social dominante.  

 
Nota. la cubierta de la revista Clij, está realiza por Jesús Gabán